Sexo tántrico...
El sexo tántrico, como su nombre indica, es una forma de tener relaciones sexuales basada en el Tantra. Ahora bien… ¿Qué es el Tantra? Esta es la pregunta básica que hay que contestar para entender el sexo tántrico.
El Tantra, en sánscrito, significa “Secreto”, y se trata de un conjunto de textos y rituales religiosos esotéricos budistas e hindúes donde se utiliza el sexo como vía para conseguir una mayor sensibilidad humana y focalizar la energía del universo.
Es decir, que, pese a lo que pueda parecer, el sexo tántrico no está pensado para “el placer” sin más (aunque, evidentemente, es placentero), sino que es una forma de acceder al autoconocimiento y recibir la energía del universo, como lo son otras formas de meditación.
Esto puede merecer una explicación extra: El Tantra se engloba dentro de un conjunto de prácticas de meditación que se desarrollaron para que la gente pudiera meditar en el día a día, y no necesitase aislarse como el Buda, tirándose días y días meditando. Así, en ese conjunto de técnicas, se contemplan prácticas para meditar y mejorar el autoconocimiento en distintas prácticas del día a día. Por ejemplo, se popularizaron prácticas de este tipo para la hora de comer, y, también, para el caso del sexo.
Algunas prácticas del sexo tántrico
Ahora, veamos algunas prácticas de sexo tántrico que pueden ayudarte a disfrutar mucho más con tu pareja:
Contacto visual
Uno de los puntos más simples pero, a la vez, más efectivos del Tantra es el contacto visual. Y es que, incluso en las parejas, hay veces en las que existe temor o vergüenza de mirar a la otra persona a los ojos.
El Tantra recomienda mantener el contacto visual durante minutos, en silencio y desnudos, sin iniciar el sexo. Los dos concentrados en “ver” dentro del otro. Esto hace que el sexo sea mucho más placentero, dado que hay una mayor conexión espiritual.
Exploración del valle
Otro punto relevante del Tantra es su culto a lo femenino. En este sentido, el hombre debe volcar su esencia para conseguir que ella disfrute, asumiendo que el placer de la mujer acabará repercutiendo en su propio placer.
Para ello, el hombre debe mostrar una actitud de plena atención al cuerpo de su pareja. Ese aumento de la excitación de la mujer hará que el hombre también goce de un mayor placer.
Hay que señalar que, pese a que esto puede parecer una obviedad, lo cierto es que, en la mayoría de las culturas, el placer en el sexo suele estar mucho más relacionado con el hombre que con la mujer.
Dominio del orgasmo
Por último (aunque habría mucho más que decir, esto son solo unas pinceladas), podemos hablar del dominio del orgasmo. El Tantra insiste en que la eyaculación hace que el hombre pierda energía física y necesite tiempo para recuperarse.
Por ello, se insiste, también, en la necesidad de ser capaz de controlar el orgasmo. De este modo, se consigue pasar del orgasmo “pico” (el normal, el explosivo y eyaculatorio) al orgasmo “valle”, que es un orgasmo sostenido en el tiempo y que permite alargar el coito.
Como puedes ver, el sexo tántrico es una práctica con beneficios de lo más interesantes. Si estás buscando nuevas formas de disfrutar con tu pareja, deberías proponerle algunas de las técnicas de esta magnífica forma de tener sexo originaria de la India.
Si quieres saber como lograr el sexo tántrico con tu pareja sigue este link:https://www.youtube.com/watch?v=6TQjfmAQgmI

Creo que esto solo puede conseguirse con un real y verdadero amor
ResponderEliminarInspiración..
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